Es muy fácil identificar una prenda de Alfredo Martínez. Aires de elegancia y un toque vanguardista son dos conceptos que bien pueden definir a esta marca que para Otoño Invierno 2017 presentó una colección de prendas en materiales como crepé, satín de seda y terciopelo, además de looks totales, tan característicos, en textiles que bien podrían haber sido sacados de una tapicería, y que el diseñador transforma en algo sumamente sofisticado y visualmente impactante.

Igualmente, los accesorios son un parteaguas: cinturones con maxihebillas remarcan cinturas, botas estampadas arriba de la rodilla alargan las piernas, e increíbles accesorios en el labio son el toque final perfecto para dar fuerza a la propuesta.

Esa visión de Alfredo para contrastar y reinventar materiales, es lo que ha hecho que un mercado tan selecto sea fiel a su marca, y por lo tanto, sus piezas se conviertan en objetos tan deseados.

Asistir a uno de sus desfiles recuerda las propuestas de calidad que existen en nuestro país. Además de ser una de las pasarelas que más me gustan e inspiran, es una prueba de que en México se hacen desfiles de verdad. Alfredo Martínez es un gran ejemplo de que hacer las cosas bien, prolonga tu lugar en la moda mexicana.